En un contexto de creciente variabilidad climática y la intensificación de eventos meteorológicos extremos, el Instituto Interamericano para la Reducción de Riesgos de Desastres- IIARRD- hace un llamado a la acción a la comunidad para comenzar a tomar conciencia sobre esta necesidad.
La prevención y la preparación son las herramientas más efectivas para mitigar el impacto de tormentas severas, inundaciones, fuertes vientos y otros eventos climáticos adversos que cada vez son más frecuentes en nuestra región.
La presidenta de la entidad, Virginia Laino, expresó que “los efectos del cambio climático los estamos viendo hoy. Lo que sucede nos tiene que servir para darnos cuenta que está pasando” y agregó “ Esto qué quiere decir para nosotros, para los ciudadanos de a pie? que hay que darle más importancia a las alertas meteorológicos y hay que empezar a formarse y educarse en qué hacer cuando me avisan que va a haber una tormenta o cualquier otro fenómeno”
La comunidad debe comprender que los fenómenos meteorológicos ya no son eventos aislados, sino una realidad constante que exige una respuesta proactiva. Desarrollar la percepción del riesgo implica entender la amenaza, evaluar la vulnerabilidad y ser conscientes de las posibles consecuencias.
Al respecto desde el IIARRD brindan 3 preguntas disparadoras para comenzar a reflexionar sobre la percepción de las diferentes situaciones.
- Conocés los niveles de alerta meteorológicos que existen y sus recomendaciones?
- ¿Pensaste alguna vez en tu plan familiar de emergencias?
- Por ejemplo, ¿sabe dónde están los documentos importantes?
Por su parte se brindan 8 recomendaciones para tener en cuenta y empezar a armar el plan de Emergencias Familiar.
- 1: Información del Grupo Familiar. Podés hacer un listado con las personas que componen tu grupo familiar y enumerar las cosas que cada uno pueda necesitar, como por ejemplo, alimentos especiales, remedios, audífonos, etc. Incorporá en este listado la información adicional que creas relevante para una situación de emergencia como grupo sanguíneo etc.
- 2:Identificá las amenazas existentes dentro y fuera de la vivienda. Por ejemplo, verificá el estado de las instalaciones eléctricas y cañerías de agua y gas, distribución del espacio físico y ubicación de los muebles, pasillos, salidas, etc
- 3: Definí el lugar más seguro de tu casa, el más alejado de peligros; y al exterior de la vivienda reconocer las vías de evacuación (principales y secundarias), las zonas de seguridad y los puntos de encuentro.
- 4: Dibujá un mapa de la vivienda como si estuvieras mirándola desde arriba, identificando todos los sectores de tu casa (comedor, dormitorios, baño, pasillos, escaleras, patio, etc.) Marcá el lugar donde se encuentran el tablero de corte de energía eléctrica, las llaves de paso de agua y gas, por ejemplo. Una vez finalizado colocalo en un lugar visible para todos.
- 5: Hacé un listado con contactos en caso de emergencia y tenelo siempre a mano ( La puerta de la heladera puede ser un buen lugar) Podés incluir , emergencias , ambulancia , defesa civil o los que creas necesarios en tu ciudad.
- 6: Armá tu Kit Básico de Emergencia. Este nos permite estar organizados y preparados para enfrentar una contingencia. Estos elementos o provisiones casi siempre se encuentran en tu hogar, por lo que te recomendamos que las organices y las tengas en un lugar de fácil acceso en caso de emergencia, y que todos sepan dónde está.
El Kit Básico se debe elaborar de acuerdo a las necesidades de cada familia y a las emergencias más recurrentes. Es recomendable que tu Kit te permita ser autosuficiente por 72 horas, ya que en situaciones de emergencia, tal vez tengas que evacuar la vivienda y la ayuda puede demorar.
Algunos elementos sugeridos para el Kit Básico de Emergencia pueden ser: Agua, (incluye botellas chicas que son más fáciles de trasladar). Comida (que se mantenga y se pueda ingerir sin cocinar, como por ejemplo latas de conserva o barras energéticas). Botiquín de primeros auxilios, medicamentos necesarios, abrelatas, artículos de aseo para hombres y mujeres, bolsas de plástico, papel higiénico, toalla pequeña y encendedor/fósforos ( entre otras cosas).
“Estas son solo algunas recomendaciones generales. Somos conscientes que no es tan fácil aplicar todo pero comenzar a tener percepción de estas cosas nos va a permitir de a poco ir preparándonos mejor. Algo es mejor que nada” finalizó Virginia Laino.
